Nuestra geografía de localizaciones abarca todo el mundo. Sin embargo, aún existen algunos lugares en los que nuestros equipos de proyecto no han trabajado. Mongolia ha sido uno de los lugares más exóticos que hemos añadido recientemente a nuestra lista de entrega de productos. Hacer llegar todos los materiales a un lugar tan lejano ha sido un viaje verdaderamente excepcional y algo a destacar. ¡Descubramos juntos esta magnífica historia!
La inmensidad del paisaje verde que rodea la zona de construcción nos deja sin aliento. Las sonrisas y la alegría de las que fuimos testigos en las fotos que nuestro cliente ha compartido nos llenan el corazón de pura gratitud: ¡nos encanta saber que nuestros productos afectan positivamente la vida de las personas y les hace felices, sin importar la distancia!
¡Conozca a la inquilina!
Nuestra cliente Lkhama llevaba tiempo soñando con una casa de madera. Tras ahorrar la cantidad de dinero necesaria para comprar una, su sueño estaba a punto de hacerse realidad. Con la ayuda de su amigo, el experimentado ingeniero jubilado Josef, se pudo llevar a cabo sin problemas y con una gran rapidez el proyecto de la casa de madera.
La cara de felicidad de Lkhama muestra que está encantada con su nueva casa. ¡Y el sentimiento es compartido! ¡A nosotros nos encanta hacer realidad los proyectos que nuestros clientes siempre han soñado!
La abuela Lkhama es la inquilina principal de la casa. Sin embargo, sus dos hijas la visitan a menudo con sus familias. Todos ellos, incluidos 5 nietos, pueden sentarse juntos en la gran mesa del comedor. ¡La casa se ha convertido en el centro de la familia!
El producto
Los principales requisitos para la casa de madera eran la eficiencia económica, el mantenimiento de la casa (especialmente los costes de calefacción en invierno) y su capacidad para soportar el clima extremo de Mongolia. El proyecto comenzó con la elección del modelo adecuado. Nuestra casa de madera residencial de dos plantas LIVINGTON resultó ser la mejor elección. Una opción de doble piel aislada era la más adecuada para un clima tan duro y extremo. Así pues, el modelo resultó ser el idóneo.
El viaje a las instalaciones de Pineca
Tras seleccionar el modelo, para asegurarse de que la calidad de los productos de Pineca eran del más alto nivel, Josef decidió visitar nuestra oficina en Vilna, Lituania, así como el lugar de fabricación donde se fabricaría el producto. Nos encantó organizar el viaje hasta allí y mostrarle cómo se fabrican nuestras casas de madera y la calidad de las materias primas utilizadas. Josef también visitó una casa construida por Pineca en Baviera para evaluar la calidad y el aspecto de nuestro producto acabado. Los viajes fueron un éxito, ¡y entonces fue cuando el verdadero viaje comenzó!
El requisito clave: un aislamiento térmico fiable
El único requisito que estaba claro desde el inicio del proyecto era asegurar que la casa fuera habitable incluso en las condiciones climáticas más extremas de Mongolia, garantizar la rentabilidad y las propiedades de retención de la calefacción, y asegurarse de que la familia no pasara frío y estuviera a gusto durante todo el año.
Para sellar las paredes contra los fuertes vientos fríos, el equipo también decidió utilizar cintas de sellado encoladas en todas las juntas de las paredes interiores y exteriores instaladas (o pegadas) en cada caso en la ranura de madera" - Josef
La "calefacción" del edificio se basa en una pequeña estufa de leña y carbón, que se utiliza normalmente para calentar y cocinar en una yurta. Delante de la pared de madera se construyó un muro de ladrillos pesados para almacenar mejor el calor y proteger la pared de madera.
Otra parte crucial para garantizar la longevidad y la eficiencia térmica del edificio fue colocar los cimientos adecuados para este clima y el suelo que se congela a 3 - 4 m de profundidad en invierno.
Sobre esta subestructura se colocó espuma de PU (Finnfoam) de 10 cm y sobre ella se colocó una losa de hormigón reforzado con acero de 20 cm de espesor, que también se aisló térmicamente por los lados con 10 cm de grosor." - Josef
El proceso de montaje
Del montaje de toda la casa se encargó el amigo del ingeniero Josef, el carpintero Heiko de Baviera, que realizó los trabajos de carpintería, techado y fontanería de forma rápida y sin mayor problema con tan solo dos ayudantes del pueblo.
Es maravilloso poder ser testigo de cómo en un tiempo relativamente corto, un edificio se convierte en una casa. Contar con un ingeniero experto y tan entusiasta fue de gran ayuda en todo el proceso de construcción y permitió terminar el proyecto en poco tiempo.
Este tipo de proyectos exclusivos nos produce una gran alegría. Poder llegar tan lejos de nuestra geografía habitual amplía nuestros horizontes y nos permite afectar de manera positiva la vida de las personas. Satisfacer necesidades diferentes a las de nuestros proyectos habituales también fue una aventura emocionante: ver que nuestros productos sirven a su propósito al máximo es una experiencia extraordinaria que nos enriquece con momentos de plenitud y agradecimiento.
¡Le deseamos a nuestra cliente muchísimos preciosos recuerdos en su preciosa casa de madera!
